Escalada de ataques contra el pueblo Guarani y Kaiowá tras la visita de la Relatora de la ONU
La Relatora Especial de las Naciones Unidas para los Pueblos Indígenas ha expresado su preocupación por la escalada de ataques que han sucedido tras su visita al Estado del Mato Grosso do Sul en Brasil.
Tras su visita a Brasil, la Relatora Especial para las Naciones Unidas de los Pueblos Indígenas Victoria Tauli Corpuz ha expresado su profunda preocupación por la escalada de ataques sucedidos en la región. Corpuz ha destacado, en la conclusión final de su misión hecha pública la semana pasada, lo alarmante de estos ataques que han seguido a su visita, incluyendo disparos e hiriendo a varios y varias indígenas de las comunidades de Kurusu Amba, Dourados y Taquara.
Los desalojos y los continuos asaltos sufridos están llevando a algunas de las comunidades a una situación crítica. Durante la visita conjunta a la región, llevada a cabo esta semana por varios miembros del CIMI, FIAN Internacional y sus secciones brasileña y alemana, se ha observado que la comunidad indígena Kusuru Amba se está enfrentando actualmente a una grave crisis humanitaria. Parte de la comunidad no tiene acceso al agua ni a la comida de manera habitual, lo que afecta especialmente a los niños y las niñas, confiando su situación únicamente a la ayuda recibida de manera irregular por la Fundação Nacional do Índio (FUNAI).
El pasado 31 de enero, la comunidad trató de recuperar parte de su territorio ancestral. Como respuesta a este movimiento, los Facenderos, quienes actualmente controlan el territorio, reaccionaron con el envío de 15 furgones de grupos armados que dispararon contra toda la comunidad. Estos grupos armados llevaron a cabo, además, la quema de aproximadamente 30 casas y la completa destrucción de las propiedades de la comunidad. Los ataques y el acoso sufrido se han visto incrementados tras la visita de la Relatora Especial de la ONU. “Únicamente queremos paz y que nuestros hijos vayan al colegio. Queremos nuestra tierra y rechazamos la violencia” ha manifestado un miembro de la comunidad.
De acuerdo con el CIMI, en 2007, 92 líderes indígenas fueron asesinados. Este número se ha visto incrementado en los últimos años, alcanzando la escandalosa cifra de 138 asesinatos en 2014. Actualmente, Mato Grosso do Sul acumula la mayor cantidad de muertes de indígenas en todo Brasil.
El CIMI, FIAN Internacional y sus secciones brasileña y alemana, hacen un llamamiento al Estado de Brasil para que pase a la acción y ponga en marcha las medidas necesarias para detener los ataques. Además las organizaciones urgen a Brasil a proveer de asistencia inmediata a las comunidades que están haciendo frente a una crisis humanitaria, incluyendo la comunidad Kurusu Amba.
Para más información contactar con castaneda-flores[at]fian.org